Aunque creo que no es adicción, sino amor. ¿O son las dos cosas la misma?
¿No es cruel ser adicta a algo que te hace sufrir? Bueno, ya lo decían por ahí... russian roulette it´s not the same without a gun.
Creo que, simplemente, es mi primer amor.
Me encanta que cruja, cuando lo muerdo...y siempre sube a punto, como un soufflé.
Le gusta que juguemos con nata, ninguno de los dos se corta al lamer.
Relleno de naranja, me espera en casa para sorprenderme. Le quito el envoltorio y disfruto del amargo placer...
A veces los bombones también me pierden, un bocado aquí, otro allá...siempre los devoro con ansiedad, y se acaban tan pronto...pero yo quiero más.
Pero prefiero los bombones helados, ya sabe...cuando te sorprenden con él por detrás.
El almendrado es mi favorito...crujiente, frío y cremoso por dentro.
Me encanta hacer que se derrita...en mi boca.
Aún cuando hemos lamido lo suficiente, batido siempre resulta más estimulante.
Cuando me roza con la lengua sólo soy...fondue.
Yo soy más de chocolate negro, me resulta menos empalagoso y más intenso, en formato helado con nata es una delicia,ajajja, pero cuidado, el placer consiste en no acostumbrarse a ello ;)
ResponderEliminarsin duda: chocolate negro... :)
ResponderEliminarUf,es mi gran debilidad y un inmenso placer para los sentidos.
ResponderEliminarLa indecisión hace que me quede con todos, desde el más dulce al más intenso...
Una chocoadicta :P